viernes, 31 de mayo de 2019

La FCA se opone a las normas de negociación de acciones de la ESMA


La Autoridad de Conducta Financiera (FCA) se opone a las normas de negociación de acciones que la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA) desea aplicar en caso de que Brexit no llegue a un acuerdo.

En una declaración emitida el miércoles por la mañana, el regulador del Reino Unido reconoció el único cambio positivo de posición de la ESMA.

El pasado mes de marzo, el regulador europeo declaró que formularía obligaciones de negociación de acciones para prohibir a las empresas la negociación de acciones británicas o europeas en Gran Bretaña, incluso si ellas mismas tienen su sede y/o cotizan en el Reino Unido.

Según la declaración publicada por el FCA el miércoles, la ESMA ha "suavizado" su posición.

Las empresas de la UE podrán negociar acciones británicas en el Reino Unido si Brexit fracasa. Pero aparentemente, algunas de las normas anteriores seguirán vigentes si la ESMA tiene éxito.

Esto significaría que una empresa de la UE, que cotizaría sus acciones en una bolsa de valores británica, no sería accesible a las empresas que operan dentro del órgano político paneuropeo.

Malo para la UE, malo para el Reino Unido


Esto puede ser problemático tanto para las bolsas de valores del Reino Unido como para las empresas que cotizan en ellas.

Sí, el FCA quiere apoyar los intereses británicos, pero para las empresas de la UE, esto también podría ser una mala noticia. Incluso si una empresa tiene su sede en la UE, su mercado más líquido, quizás el único, para el comercio de acciones podría estar en el Reino Unido.

Por ejemplo, impedir que las empresas de inversión de la UE accedan a los mercados británicos podría, paradójicamente, obstaculizar su capacidad para comerciar con empresas de la UE.

"Algunas acciones tienen su principal o único centro de liquidez fuera del país en el que está incorporado el emisor", dijo la FCA en su comunicado de prensa.

"El enfoque de la ESMA impondría restricciones a los inversores y restringiría la libertad de las empresas para elegir una bolsa de valores donde desean cotizar."