jueves, 27 de febrero de 2020

Impacto del coronavirus en las tres principales monedas occidentales

Los mercados financieros nunca responden bien a la incertidumbre, la aparición del coronavirus ha tenido inevitablemente un impacto negativo en el rendimiento de varias monedas. La posible longevidad del virus sigue siendo incierta, pero sus desastrosas consecuencias en China han dado lugar a una reevaluación de los principales vínculos comerciales.

El PIB de China ha sufrido, con efectos de gran alcance dada la posición de China como una de las principales potencias económicas del mundo, mientras que las importaciones y exportaciones en todo el mundo se han visto frenadas por los cambios en la demanda. Las principales monedas del mundo se han debilitado, tanto como reacción a lo que ya ha ocurrido como por miedo a lo que está por venir.

Una vez que se resuelva el brote de coronavirus, todavía llevará tiempo que China se recupere de las semanas de poder económico severamente limitado. Las previsiones del mercado para 2020 tendrán que ser revisadas y reescritas, ya que esta evolución imprevista afecta a algunas de las monedas más comercializadas del mundo.

Aquí hay un breve resumen de cómo el miedo al coronavirus ha afectado al dólar estadounidense, a la libra esterlina y al dólar canadiense. Estas repercusiones económicas no tienen importancia en comparación con la trágica pérdida de vidas en China, pero los cambios en el mercado causados por el virus podrían tener efectos duraderos en estas monedas extranjeras.

Estados Unidos (USD)


La condición de refugio económico de los Estados Unidos ha permitido que el dólar estadounidense (USD) se desempeñe con fuerza, mientras que la mayoría de sus contrapartes se han estancado o colapsado. Como la preocupación por los brotes de coronavirus ha provocado la volatilidad de varias divisas importantes, muchos operadores han recurrido al dólar estadounidense como moneda refugio.

El dólar también tiene una clara ventaja sobre otras monedas tradicionalmente seguras, como el franco suizo y el yen japonés. Suiza y Japón dependen más de China para sus negocios, mientras que los Estados Unidos dependen menos de China como socio comercial. Además, el informe del empleo doméstico es un buen augurio para el dólar en el futuro inmediato, ya que indica que la moneda parece estar bien posicionada para seguir siendo un refugio seguro para los comerciantes.

Una vez que el temor al coronavirus haya desaparecido, los inversores pueden tratar de recuperar el alto potencial de crecimiento que se puede encontrar con monedas de mayor riesgo como el dólar canadiense. Sin embargo, el dólar sigue siendo atractivo para los operadores, ya que la incertidumbre reina.

Reino Unido (GBP)


El Reino Unido no es tan directamente vulnerable a una pérdida de comercio con China como otras economías europeas, con la libra esterlina (GBP) actuando como un mini refugio seguro en Europa. La libra esterlina subió cuando muchas monedas cayeron inmediatamente después del brote de coronavirus y luego se derrumbó por sí sola cuando otros mercados adoptaron una postura más optimista. Como resultado, la libra esterlina cayó frente a varias monedas importantes, aunque el coronavirus está lejos de ser el único factor que influye en el crecimiento económico británico.

La inminente posibilidad de que Brexit sufra un grave impacto durante su período de transición, que se espera que termine a finales de 2020, está haciendo que algunos inversores actúen con cautela. Los recortes de los tipos de interés propuestos, que podrían llegar en marzo de 2020, harían que esta moneda de bajo rendimiento no fuera atractiva para los comerciantes. La fortaleza del dólar también llevó a los analistas a aconsejar a los operadores que vendieran en corto la libra esterlina en cualquier cuenta real en los corredores internacionales, dados los riesgos a la baja a largo plazo para la libra esterlina en los principales pares de divisas.

Aunque la libra esterlina puede resultar menos afectada que otras monedas en cuanto a las consecuencias directas del brote de coronavirus, la incertidumbre general del mercado ha creado un entorno en el que la libra esterlina tendrá dificultades para prosperar.

Canadá (CAD)


La dependencia del Canadá del petróleo como proveedor y de China como socio comercial significa que el impacto económico del brote de coronavirus ha sido importante en América del Norte. El dólar canadiense (CAD) ha caído a su nivel más bajo frente al dólar de los Estados Unidos en los últimos dos meses, debido a la reducción de la demanda de petróleo crudo en las primeras semanas de 2020.

Sinopec Corp., el mayor importador de petróleo crudo del mundo, redujo su consumo en un 12%, la mayor caída en más de una década. Esto condujo a una espiral descendente de los precios del petróleo, con niveles a principios de febrero unos 10 dólares inferiores a las previsiones económicas. Un mercado de trabajo robusto en el Canadá podría mitigar el golpe de la reducción de la demanda de petróleo, aunque la posición del Canadá como principal exportador del país significa que algunas consecuencias negativas son inevitables.

Si el temor al virus persiste, los inversores serán aún más reacios a apoyar el dólar canadiense. La dependencia del Canadá de las exportaciones de petróleo lo hace más vulnerable a los acontecimientos en China que la mayoría de los demás países, pero también le da a la nación una clara ventaja. Cualquier noticia positiva que salga de China le dará al DAC la oportunidad de una recuperación inmediata, que los operadores estarán observando de cerca.

El potencial alcista del CAD y la fiabilidad a largo plazo del USD harán que ambas monedas sean atractivas para los inversores, ya sea como una operación inmediata o como una para observar. Por el contrario, las perspectivas son más preocupantes para la libra esterlina, aunque los posibles recortes de los tipos de interés podrían sentar las bases para una recuperación económica.

Es fundamental que el continuo temor al coronavirus haga que los mercados operen con un grado de incertidumbre mayor que el habitual, lo que probablemente fomente un comportamiento de trading más cauteloso.