viernes, 4 de febrero de 2022

Ser un trader con mentalidad científica

Ser un trader con mentalidad científica

Ya he explicado cómo compartir las mismas características que los jugadores de póquer y los deportistas de élite puede ayudarte a comerciar. Esta vez te voy a decir por qué deberías operar como un científico.

El método científico: los principios básicos

Los científicos siempre empiezan con la observación. En términos sencillos, es el proceso de utilizar los sentidos para recoger datos sobre las constantes del entorno. La observación ayuda a distinguir las pautas de los incidentes aleatorios.

Una vez que un científico ha reunido suficientes datos, puede formular una teoría. Los seres humanos son curiosos y a menudo intentan dar sentido a lo que ocurre a su alrededor. Intentamos explicar nuestras observaciones haciendo suposiciones o hipótesis.

Pero, por supuesto, una hipótesis no significa nada hasta que se haya probado. Si las pruebas empíricas confirman nuestras hipótesis, se puede decir que se convierten en teorías que se utilizan para generar futuras observaciones.

Sin embargo, la belleza del método científico es que puede enseñarnos a ser humildes. ¿Cómo? Al estar siempre abiertos a nuevas observaciones, los científicos reconocen que sus teorías no son verdades absolutas. La apertura de miras les permite aceptar que la comprensión humana siempre se quedará corta frente a las complejidades de la naturaleza y les anima a permanecer atentos a nuevas pruebas que puedan cuestionar las teorías preexistentes. Para los traders, este tipo de mentalidad abierta podría ser un antídoto contra el exceso de confianza y el exceso de operaciones, permitiéndonos darnos cuenta de que está bien no tener razón todo el tiempo.

¿Cómo se negocia como un científico? He aquí algunas medidas que puedes tomar:

Observe los mercados con atención y busque las tendencias.

Como trader, ya debería tener una comprensión básica de los factores técnicos y fundamentales que generalmente mueven los mercados. Probablemente tenga una idea de cómo un acontecimiento económico concreto, como una decisión sobre los tipos de interés o la publicación del PIB, puede afectar a la acción de los precios, o cómo ciertos patrones de velas señalan que puede producirse un cambio de tendencia.

Para obtener una ventaja aún mayor, puede ampliar su base de datos de factores de mercado haciendo observaciones cuidadosas y anotando las tendencias recurrentes. Por ejemplo, ha observado recientemente que las subastas de bonos europeos tienden a tener un impacto significativo en el sentimiento de riesgo y en la acción de los precios cuando los problemas de la deuda de la eurozona vuelven a salir a la luz. Puede marcar estos eventos en su calendario para ver cómo suele reaccionar el mercado.

Utilice estas observaciones para crear una hipótesis sobre la acción del precio.

Digamos que usted ha notado que el dólar estadounidense tiende a venderse cuando las conversaciones sobre el QE3 dominan las ondas y quiere aprovechar esta acción del precio más adelante. Lo que puede hacer es observar lo que realmente sucedió, cómo reaccionaron los pares de dólares y qué patrones de negociación le habrían permitido capturar parte de ese movimiento.

Puedes seguir anotando estas observaciones en tu diario comercial hasta que estés seguro de que tu hipótesis está lista para ser probada. Tenga en cuenta que también sería útil elaborar un comentario sobre la acción del precio, que podría incluir la acción del precio antes del evento, la reacción inicial y la dirección principal que tomó el par después.

Compruebe esta hipótesis operando cuando se produzcan patrones similares.

Una vez que tenga suficientes datos que respalden una pauta concreta que haya observado, el siguiente paso es poner a prueba esa teoría operando cuando surja la oportunidad. Siguiendo mi ejemplo anterior sobre el dólar estadounidense y la especulación del QE3, puede buscar posibles operaciones antes de un anuncio de la Fed, cuando se supone que el banco central habla de una mayor flexibilización.

Por supuesto, una práctica deliberada sería muy útil en este sentido. Cuando opere sobre la base de estos modelos, también debe anotar sus nuevas observaciones e indicar si necesita cambiar su suposición.

Recuerde que debe mantener la mente abierta.

Por último, pero no por ello menos importante, es fundamental mantener la mente abierta en todo momento. Recuerde que los mercados son volubles y que sus suposiciones no son verdades absolutas. Como probablemente haya observado en su experiencia de trading, el entorno del mercado es muy dinámico y el sentimiento siempre puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos.

Por lo tanto, debe estar siempre abierto a posibles ajustes o a modelos de mercado completamente nuevos. Al igual que un buen científico, un buen trader debe estar abierto a nuevos datos. Por ejemplo, los cambios en los temas generales que dominan los mercados suelen repercutir en la reacción de ciertos pares de divisas a determinados informes. A veces, un par de divisas ni siquiera reacciona a un informe de gran impacto porque hay factores más importantes en juego.

Mantener la mente abierta también puede permitirle ampliar su hipótesis a otros factores que pueden afectar a la acción del precio. Piensa en ello como un ajuste constante de tus teorías y planes de trading.

Si adopta planes de negociación basados en sus observaciones y suposiciones, podrá crear confianza en estos patrones. De este modo, podrá ser más agresivo cuando esas suposiciones se confirmen o más cauto cuando sus observaciones sean aún inciertas. También puede ayudarle a gestionar el riesgo, sabiendo cuándo hay que correr grandes riesgos o cuándo hay que ir a lo seguro.

Además, si mantiene una mentalidad científica al operar, podrá tratar cada operación como una fuente de información nueva que podría mejorar o refutar sus teorías. De este modo, podrá beneficiarse incluso de las operaciones perdedoras, ya que las utilizará, al igual que las operaciones ganadoras, para comprender mejor los mercados.